Conversamos con Patricia Dalmas de la escuela de Artes Escénicas El Picadero en su galpón de Agraciada y Zufriategui, para conocer las actividades artísticas que se desarrollan allí y sus proyectos de circo social.
¿Cómo surgió la idea de juntarse y conformar El Picadero?
El Picadero nace en el 2005 con la clara voluntad de hacer crecer al nuevo circo contemporáneo como disciplina artística en el Uruguay, desarrollarnos en este arte y darlo a conocer a otros.
A partir de 2003 nos empezamos a encontrar. Fueron fundamentales algunos viajes que hicimos para conocer la movida del circo en otros lados y sentimos la necesidad de tener un lugar propio para desarrollar el circo en Uruguay. A partir de ir descubriendo ese mundo, nos surgió el interés de trabajar el circo social, desarrollar proyectos con el circo como herramienta de transformación social.
Logramos encontrar un galpón que nos alquilaban barato en Agraciada y San Fructuoso. Ahí empezamos a generar actividades, talleres para jóvenes, espacios de Varieté y espacios de entrenamiento, ensayo y creación.
Todo esto empezó a crecer rápidamente, llegó un momento en que había mucha participación y apropiación de la gente. Nos organizamos y comenzamos a pensar colectivamente en cómo hacer crecer el proyecto. De ahí en más aparecen millones de formas de organización que venimos armando y desarmando.
Ha cambiado mucho de esa época hasta ahora, acompañado también por un cambio favorable en las políticas culturales que han permitido sostener este desarrollo. Empezaron a aparecer fondos locales y nos animamos a presentarnos a fondos internacionales.
La Asociación Civil
En el colectivo somos alrededor de 15 con niveles distintos de participación, cada uno participando desde la forma y el lugar que puede. Tenemos reuniones generales que pueden ser una vez por mes, cada dos meses o 15 días dependiendo en lo que estemos. Después tenemos reuniones por área como pueden ser los talleristas, los encargados de mantenimiento de la infraestructura, formalmente tenemos un presidente, pero como formalidad.
Entre 2005 y 2010 lo que pasó fue un gran crecimiento de participantes y las ganas de seguir creciendo a otros lugares. Queríamos formalizarnos pero manteniendo la esencia del colectivo, que siempre fue desde la autogestión y la horizontalidad.
A partir del 2010 ya con la Asociación Civil, comenzamos a generar algunos convenios. En el 2012 nos dicen que tenemos que dejar ese lugar y comenzó la búsqueda de hacia dónde irnos. Ahí dimos con este lugar hermoso y le presentamos un proyecto al Municipio C, es un comodato que nos dio otras posibilidades y otras responsabilidades también.
En el 2013 nos mudamos y también fue el primer año que nos presentamos a un fondo internacional para realizar el Festival Internacional de Circo. En el 2014 realizamos el primer Festival Internacional en nuestra casa.
Todo este crecimiento, sumado a los años de talleres acumulados generó que las personas que comenzaron con nosotros o se formaron en el Picadero, crearon a su vez otros proyectos propios. Todos esos cambios implicaron repensarnos una vez más, mudarnos para acá implico también cambiar un poco el público.
Proyectos y redes con los que se relacionan
Tenemos una fuerte vinculación con otras organizaciones que hacen circo, compañías, etc. Estamos funcionando muy en bloque, en la marcha del 8 M se armó una red de cirqueras que nos juntamos para hacer una intervención. En todos los grandes eventos de circo que se realizan en Uruguay participamos todos más allá de quien lo organice, no tenemos una estructura de participación pero sí una colaboración continua.
Empiezan a crecer otros proyectos en la vuelta y el circo empieza a visualizarse como parte de una red de organizaciones. Vínculos más territoriales con organizaciones y colectivos de cultura comunitaria de la zona, el Centro Cultural La Cuadra, la Cooperativa Capurro, con los vecinos que tenemos acá de la scola do samba “Unidos do norte”.
Realizamos un acuerdo con el Cirque du mond que es una organización canadiense que se encarga de fortalecer proyectos de circo social, en el año 2017 y 2018 vinieron acá e hicieron unas capacitaciones de una semana cada una para personas vinculadas o con ganas de implementar proyectos de circo social.
Hemos participado de la Red de Cultura Viva Comunitaria, también somos punto de cultura, estamos vinculados a la red de puntos de cultura. Este relacionamiento de El Picadero con el medio como organización ha crecido muchísimo en los últimos cinco años, los primeros años estaban más metidos para adentro y creciendo, después salimos a la comunidad.
Circo social
Empezamos a trabajar a través del INJU, haciendo talleres de circo en distintos barrios y localidades del interior. Llegábamos al lugar, hacíamos el espectáculo primero y a partir de haber captado el interés y la motivación de los jóvenes, realizábamos talleres de circo.
Comenzamos a aplicar a fondos del MIDES, hace unos años venimos ejecutando proyectos con jóvenes que vinculan al circo pero como herramienta de encuentro, de transformación, el conocimiento del cuerpo, el trabajo en equipo, ampliar un poco los horizontes.
Otro año hicimos talleres en nuestra casa con niños y adolescentes, a través de un grupo de otras organizaciones logramos traer gurises de Casabó, otros de un Hogar de INAU acá en Castro, de otro Hogar que esta por Vilardebó. Realizamos un ciclo de talleres con una actividad de cierre en un lugar abierto, en el marco de la semana de los derechos de los niños.
En estos años de trabajo hemos creado un fuerte vínculo con el oeste, tratando de implementar que los proyectos estén más permanentes en alguna institución.
En el 2016, hicimos la primera llegada a Casabó a través de una ong que trabaja allí. Ahora estamos trabajando allí en otro espacio que se llama “Siete Hectáreas”, un espacio gestionado a través de la comunidad y el Municipio. Estos fondos son bastante chicos, entonces si bien hemos permanecido estos cuatro años yendo a los barrios, siempre es medio salteado. De alguna forma hemos permanecido, pero no de una manera tan continúa como quisiéramos.
En este formato de proyecto nos interesa el encuentro entre jóvenes de distintos barrios, el circo social es una herramienta que esta buenísima para encontrarse y crear lazos con otros.
Desde los proyectos de circo social tratamos de hacer siempre alguna actividad, este año ya hicimos una en el parque Capurro que invitamos a un montón de organizaciones, concurrieron los centros juveniles de El Tejano, de Peñarol, Jóvenes en Red, otro
juvenil de Casavalle, etc.
Talleres
Tenemos como dos formatos de taller, uno es por disciplinas artísticas vinculado a la acrobacia, que tiene un perfil para jóvenes y adultos. Después tenemos una propuesta para niños y niñas que es más integral, la idea es jugar mucho con lo corporal vinculado a las disciplinas de circo.
Hoy tenemos tres talleres para distintas edades que abarca desde niños de cuatro años a adolescentes de 15 en formato de circo integral. Se ha creado un espacio divino porque las familias vienen a dejar a sus hijos y se quedan aquí, charlan, se genera otra movida, nos dan una mano y participan de algunas actividades.
Los martes, miércoles y jueves, tenemos talleres para niños y adolescentes de 17:30 a 19:00. Los lunes y jueves a partir de 19:00 a 21:30 talleres de acrobacia. Los lunes de 19:00 a 21:30, los jueves de 16:00 a 17:30 y los sábados de 11 a 13 acrobacias en telas.
Los miércoles de 19:30 a 21:30 tenemos un bloque de danza aérea. Lo que tenemos ahora es danza aérea con arnés, se trabaja con cuerdas y un soporte parecido a la escalada, pero es una disciplina acrobática y de danza. Estos talleres son para jóvenes y adultos.
Los martes de 19 a 22 hs, hay un espacio abierto de entrenamiento guiado, cualquiera puede venir a entrenar lo que quiera que va a tener un cuidado y una supervisión. Este espacio es a la gorra.
Tenemos módulos intensivos, dentro de poco va a haber uno de danza acrobática, traemos docentes del exterior y son formaciones intensivas que se pueden desarrollar durante todo un fin de semana.
Costos
El costo de los talleres para niños es de $900 pesos por mes y para adultos $1000, también tenemos becas a través del Comunal 16 hay que inscribirse allí para acceder, siempre estamos buscando la manera de que el que quiera participar pueda hacerlo.
Espectáculos
Cada dos años hacemos un ciclo que se llama “Circo de cerca”, son espectáculos de creaciones nacionales independientes y consta de un espectáculo por mes.
Lo que sostenemos una vez por mes todos los años es un espacio para niños y familias, es un espectáculo para el que invitamos a colegas a participar y después se deja un espacio libre de juegos. Con esa lógica de ver primero el espectáculo y después experimentar. Este es un espectáculo a la gorra que se realiza los primeros sábados de cada mes, esperemos comenzar el primer sábado de abril o apenas se pueda.
Corredor Oeste
El proyecto actual de circo social en el que estamos trabajando se llama “Corredor oeste” y una de las patas de ese proyecto es realizar un ciclo de talleres acá. La idea es empezar el miércoles de 15 a 17 hs cuándo se pueda, va a haber talleres para jóvenes a partir de 14 años de forma abierta y gratuita para todos los jóvenes que deseen participar. Nosotros hacemos la convocatoria a través de las organizaciones del oeste pero esta bueno aclarar que cualquier joven se puede acercar a El Picadero en ese horario.
La otra pata, es poder generar una red entre las organizaciones comunitarias del barrio, generar un diálogo abierto entre los espacios públicos y la comunidad, la idea es hacer eventos en los espacios públicos donde llevemos el circo y los gurises que están transitando la formación de circo puedan salir a mostrar lo que hacen. Se llama “Corredor oeste”, porque nos planteamos de acá hasta el Cerro hacer encuentros puntuales por todo el oeste.
¿Por qué el circo?
Yo soy profesora de educación física y cuando descubrí el circo me pareció una herramienta increíble, conecta con algo muy lúdico, al circo le interesa la búsqueda más genuina, es desafiante, muy amplio en cuanto a disciplinas entonces te da la oportunidad de encontrarte cómodo en algún lugar.
Está muy implícita la búsqueda y la apropiación, no hay contenido rígido, es parte del circo la búsqueda de la creatividad, la búsqueda de lo extraño, de la transmisión colectiva, históricamente el circo se transmitió entre familias.
También a los gurises les aporta el auto conocimiento corporal, la percepción del riesgo y poder controlar ese riesgo, el cuidado es parte sustancial del circo, lo colectivo también porque nadie hace circo solo, es muy inclusivo, hay lugar para todos en el circo.
Contactos
El teléfono es 098 864378, pueden escribir a galponelpicadero@gmail.com con el asunto Inscripción taller corredor oeste para esos talleres. Por el Facebook “El Picadero”, el Instagram “Galpóndecircoelpicadero” o arrimarse a nuestra casa.
Equipo Comunicación y Cultura
El Tejano