En el programa “Con voz de barrio” de El Puente FM, conversamos con Noemí Apostoloff sobre la Comisión de Apoyo a la Memoria de la Federación del Vidrio.
El pasado 27 de junio se cumplieron 48 años del Golpe de Estado y de la Huelga General en Uruguay. La Comisión de Apoyo a la Memoria de la Federación del Vidrio realizó un acto homenaje a esta gesta histórica. Para conversar sobre la Comisión, su historia, sus sueños y realidades, recibimos en Con voz de barrio a Noemí Apostoloff
¿Qué es la Comisión de Apoyo a la Memoria de la Federación del Vidrio?
La Comisión de Apoyo a la Memoria de la Federación del Vidrio, nace cuando Tabaré Vázquez hizo las reuniones de ministros acá en la zona. Le tocó al Ministro Víctor Rossi de Obras Públicas organizar el recibimiento a los vecinos para escuchar sus necesidades en la Federación del Vidrio. A partir de ahí, él tira la idea de por qué no conformar una Comisión para rescatar este lugar, ahí nos embalamos los que estábamos, de esto ya hace más de cuatro años que nace con ese espíritu la Comisión.
Somos todos de la zona, para nosotros la Federación del Vidrio es una luz, es un lugar donde se marca fuertemente una de las principales y tantas pisadas del movimiento sindical y la militancia social. La Federación no solo es una casa vieja que mantiene muchas historias, la Federación para nosotros los trabajadores era nuestra casa, íbamos aunque no trabajáramos en el Vidrio. Mi papá era jubilado del Vidrio y así muchas familias.
La idea de la Comisión nació muy a lo tejano, con un grupo más pequeño. Fuimos trabajando, sacamos nuestra personería jurídica y solicitamos a la Junta Departamental de Montevideo la expropiación. La Federación a lo largo de su historia tuvo muchos dueños, pero en definitiva no tenía un dueño. Queríamos que de una vez por todas eso se terminara y que se inaugure un nuevo proceso, donde asegurarnos el futuro más allá de las personas que en forma coyuntural hoy formamos parte de la Comisión, así logramos la expropiación.
En este año y medio y como en todos lados, se han ido paralizando talleres, actividades, etc. Nos habían solicitado el lugar para que gurises del INAU hicieran gimnasia en el fondo y ya habíamos largado algunos talleres, aparte de eso ensayaban nuestras dos murgas “Los Diablitos Verdes” y “Los Diablos Verdes”
¿Qué era la Federación del Vidrio?
La Federación del Vidrio era donde coordinaban los diferentes sindicatos del Vidrio y allí tenían su casa sindical. Enclavada en una zona como la nuestra dónde es un privilegio vivir, porque independiente de nuestros dolores, La Teja se destaca por su unidad y solidaridad. Tenemos nuestros rasgos anarcos que de repente no nos ponemos de acuerdo y nos decimos alguna que otra cosita, pero llegado el momento cerramos filas todos.
Por aquel entonces en la Federación estaba Antonio Iglesias a la cabeza, que para cualquiera de nosotros era un libro abierto, aprendíamos, escuchábamos, pese a que era cascarrabias fue un hermoso ser humano, solidario y duro como todos nosotros.
En este lugar, no fue por casualidad sino por derecho propio, que en la víspera del primero de mayo se juntaron todos los dirigentes sindicales de la época preparándose para afrontar el inminente golpe de Estado. Eso no fue una cosa espontánea de las masas, ya se había resuelto en el Congreso del Pueblo que ante la amenaza de un golpe militar ocupáramos todas las fábricas. Era nuestra manera de tratar de frenar el avance del fascismo no solo en Uruguay, sino en toda América Latina. Desde aquí se da la orden de ir a ocupar las fábricas en el momento en que se confirma el golpe. La Federación es eso y mucho más, la Federación es la gente, son los vecinos, las organizaciones sociales, es parte importante de la sociedad de La Teja y de la historia, por eso nombramos a esta comisión de apoyo a la memoria y también queremos que se transforme en una sala donde constituir un pequeño Museo de la Memoria
Vos fuiste protagonista de ese momento histórico, contanos ¿cómo era la Teja y el movimiento sindical por esos años?
Yo era protagonista pero era una pulguita, era muy chica, nunca fui dirigente, era una persona inserta en mi zona, en mi barrio, comprometida como miles. La Teja tenia fábricas cada 3 o 4 cuadras de diferentes rubros; la Química, las Textiles, Metalurgicos, las de Vidrio, los Frigoríficos, la Aguja, el Bao, Vidplan, Codarvi, era un anillo de fábricas, era un barrio rico de trabajadores porque los días de cobro eran de fiesta y también era rica en lucha y coordinación de los trabajadores organizados
Desde el punto de vista social teníamos la Liga de La Teja, que aglutinaba a todos los clubes sociales de La Teja. Algo que no me quiero olvidar es de La Casilla, las monjas de la Casilla jugaron un papel sumamente importante en nuestra zona, no solo en el apoyo a la resistencia y a rodear la huelga, sino por muchos años en la clandestinidad. Ahora no está el cura Ernesto de la plaza 25 de mayo, la Parroquia allí albergaba a muchísimos uruguayos que estábamos contra la dictadura, que queríamos la libertad, que resistíamos como podíamos.
Un barrio donde por sobre todas las cosas estaba la unidad, pero con matices, mira que no era un camino de rosas, había lucha ideológica, discusiones de métodos, pero por sobre todas las cosas primó siempre la unidad. Teníamos cada personaje que eran un orgullo, estaba Ruben Sassano, Jaqueline Ubal, en el Vencedor Andrés Villar, lugares donde había referentes, tenías el comedor de la Liga de La Teja con el Pistola Marsicano a la cabeza, Manolo, el Pocho Piqué, Andrés que era un gurí, allí albergaron el comedor con la cocinera Ramona y dónde más de 300 gurises iban a comer allí.
Cuando vos me preguntas que era La Teja, te tengo que contestar que la Teja era la capacidad para ver un amanecer cuando había nubarrones terribles en el cielo. Estaba la cultura popular resistiendo, leyendo entre líneas, estaban las mujeres heroicas, las madres de los gurises que sus compañeros estaban presos, las mujeres que habían estado ocupando sus fábricas. Las escuelas, todos cumplieron un papel de una cantidad de eslabones que dio solidez a los proyectos más responsables o posibles en su desarrollo.
¿Cómo ves actualmente al movimiento social en La Teja y en el país, en la actual coyuntura de crisis social y política?
En la actividad que hicimos por el 48 aniversario de la Huelga General, fue uno de los temas de los que se habló y queremos agradecer públicamente al Puente FM porque lo transmitieron en directo. Ese fue uno de los temas en esto que ahora le llaman el conversatorio y estuvo muy bueno porque podes escuchar las diferentes miradas. Yo creo que en esta coyuntura nosotros no hemos perdido la base, porque el miedo como lo tuvimos a la dictadura pero esta vez a la pandemia, siempre yo digo que le tenemos miedo al miedo, porque el miedo te paraliza, el miedo no te deja pensar, no te deja avanzar y te llena de dudas, el miedo mata certezas.
Tu fíjate la contradicción que se da, en medio de toda esta parálisis, de esto no lo puedo hacer, aquello no lo puedo hacer, que lo otro por el zoom, etc. cuántas ollas populares existen y arrancaron en nuestra zona para apoyar a aquellas familias que la están pasando muy mal y se organizaron y salieron. Eso es toda la reserva y la cultura de nuestro barrio en lo social, en lo solidario y en la propia lucha de la denuncia.
¿Cuántas firmas se juntaron en nuestra zona contra los 135 artículos de la LUC? Esto no sale de lo espontáneo, sale de gente pensante, madura, que tiene claro por dónde no tiene que transitar y nuestra zona sin dudas es de las más golpeadas.
A nivel nacional, en el interior de nuestro país también hay ollas populares, juntada de firmas, respuestas para el que más las necesita ante un gobierno ausente. El gobierno salva la petisa porque trajo las vacunas, con eso nos pretendieron hacer creer que nuestros muertos, nuestros compatriotas muertos eran números, te lo decían como quien relataba el 5 de oro.
Hay resistencia porque es injusto, este no es el camino que nuestro pueblo necesitaba. Las medias verdades se transforman en mentiras, porque vos tenés trabajadores de la salud que te cuentan lo que están viviendo, vecinos y vecinas, compañeros internados que también te cuentan la que vivieron, familias enteras con Covid que no pudieron ser atendidas porque los médicos no daban. Después por la televisión primero te daban las cadenas simpáticas del Presidente de la República y después ya no hubo espacio para que hicieran esa cadena, indudablemente porque no eran creíbles.
La palabra que me sale es resistir, resistir a la pandemia que por suerte hoy nuestros compatriotas se están perdiendo menos por el Covid maldito. Hoy me entero por ejemplo que se murió el empleado de la carnicería de Real y Carlos María Ramírez, entonces no es así hermano, las organizaciones sociales están funcionando de otra forma pero sí tienen respuesta, tienen respuesta los sindicatos y tienen respuesta ustedes, una radio comunitaria que está trabajando y tratando de hacer llegar este trabajo lo máximo que se pueda. Las organizaciones están funcionando y dando respuestas con nuevas modalidades pero como siempre.
¿Qué tan importante es la memoria para La Teja y para el movimiento social?
Yo te lo resumiría en una frase que puso Ricardo Rivero “sin memoria no hay futuro” y nosotros tenemos mucha memoria y la tenemos no porque nos guste el olor a naftalina, la tenemos porque la memoria nos acompaña, nos impulsa, nos ayuda a no volver a cometer errores. Valorar las generaciones que se han ido, pero que sin ellas no hubiera sido posible llegar a lo que estamos hoy recordando. Que no es solamente la huelga general, es la resistencia, la base de la fuerza progresista, la base de las mejoras que ha tenido nuestro barrio. Cuando yo era chica, en la plaza 25 había arena sucia, amaquitas y sube y baja, hoy tenemos una plaza con piscina, un salón multiuso maravilloso, los juegos saludables, las mejoras en nuestro barrio están a la vista y las disfrutamos.
No tener memoria para mí es creer que cuando nacimos nosotros empieza la historia y eso es una canallada, somos parte de la historia y de la evolución de la historia de nuestro barrio. Le mando a la Radio El Puente un fuerte abrazo porque siempre están y a todo mi barrio.
Con voz de barrio